Un día Juanito espera a su papá cuando llega de su trabajo y sin previo aviso le dice:


-¡Papá, ya lo sé todo!


Al papá se le suben los colores al rostro y contesta rápidamente:


-Mira hijo, ¿con $100 te quedarías callado?


-Está bien papá, lo acepto.


Hecha la transacción, Juanito se queda pensando que esto es un buen negocio y decide aplicárselo a todos los varones adultos de la casa: hermanos, tíos e incluso abuelos y los resultados fueron los mismos.


Haciendo cuentas de todo el dinero que ha juntado, está Juanito en la sala cuando escucha que suena el timbre y asomándose por la mirilla, observa al cartero parado frente a la puerta de su casa y decide aplicarle la misma técnica para recolectar más dinero.


Abre la puerta y dice:


-¡Señor cartero, lo sé todo!


El cartero sorprendido le contesta:


-¡Lo sabes todo Juanito!


-¡Todo! Contesta Juanito sin pestañear


El cartero emocionado y a punto de derramar lágrimas, extiende los brazos dice:


-¡Ven a mis brazos hijo mío!


Felicidades a los Papás en su día